El sensacionalismo de la información es una técnica o estilo que expresa e interpreta la realidad con el fin de producir impresión, emoción y sensación en la población. Este es aplicable a todos los medios de comunicación y se caracteriza por la tendencia a exagerar y dramatizar la información narrada, lo que conlleva a una distorsión de la realidad. Este estilo difunde, en su mayoría, información polémica, en la que se resalta la violencia, las catástrofes, los crímenes, los asesinatos, los secuestros, los robos, y se banalizan otros aspectos de la vida social. Esto con el objetivo de llamar la atención, creando una idea que se aleja de la realidad y desinforma a la comunidad.
Las primeras manifestaciones de carácter sensacionalista se remontan al siglo XVI con las gacetas alemanas y francesas, las cuales incluían notas acerca de dramas sociales, familiares, crímenes, asesinatos e información polémica sobre la realeza. Sin embargo, hasta la segunda mitad del siglo XIX se asumió este estilo de periodismo, el cual se identificó principalmente en Inglaterra, Alemania, Francia y Estados Unidos.
En este último país se ubica el origen del concepto, ya que, en Nueva york, entre 1895 y 1898, se creó una batalla periodística entre dos de los diarios más influyentes de la época: New York World, de Joseph Pulitzer, y el New York Jornal, de William Randolph Hearst; ambas publicaciones de enfoque sensacionalista. Desde ese entonces, comenzó la circulación de una tira cómica llamada Hogan’s Alley, de Richard F. Outcault, cuyo personaje principal era Mickey Dugan, un niño vestido de amarillo que, posteriormente, dio lugar al término prensa amarilla.
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