El Plan de Desarrollo 2019-2024 elaborado de la mano con la firma consultora Remolina Estrada, junto con los representantes del sector productivo y los aportes de los de líderes de la Universidad, será nuestra hoja de ruta para los próximos seis años.
El pasado miércoles 8 de mayo, se llevó a cabo la presentación de este plan a líderes de la Universidad, después de la aprobación de la Junta Directiva. Este se sustenta en nueve elementos claves, con los cuales buscamos ser una Institución innovadora, pertinente y sostenible en 2024, que forme integralmente personas autónomas, éticas y creativas, que contribuyan a transformar su entorno para construir una sociedad más próspera.
Una de las claves será la transformación digital, elemento con el que se espera ofrecer una experiencia digital que fomente el desarrollo académico, la investigación y la extensión, que permita ampliar la cobertura y el acceso a la educación superior.
En el 2019, la premisa del plan es asumir grandes retos en toda actividad realizada y unir esfuerzos para aportar a la consecución de Plan de Desarrollo 2019-2024, a través de valores propios como la autodeterminación, la tolerancia y la integridad. Asimismo, en la consolidación de la creatividad e innovación, la incertidumbre, la interdependencia, la solidaridad, la sensibilidad y el equilibrio, como valores que guíen nuestro quehacer diario.
Con el despliegue del Plan de Desarrollo UNAB innovadora, pertinente y sostenible, estamos reafirmando nuestro compromiso de poner al alcance de nuestros públicos de interés alternativas de aprendizaje que impulsen el talento y el desarrollo de su vida, contribuyendo así al crecimiento económico y sostenible del país, así lo señaló Juan Camilo Montoya Bozzi, rector de la UNAB.
Esta nueva estrategia, que guiará los esfuerzos de la Institución durante los próximos seis años, permitirá construir una mejor Universidad e involucrarse en un contexto global, que permita llegar a más países a través de la enseñanza, el dominio de otro idioma y la movilidad de estudiantes y profesores.
La generación y transferencia, así como la participación en redes académicas y científicas le permitirá a la Universidad ser reconocida por su gestión del conocimiento.
En la búsqueda por ser una Universidad innovadora, pertinente y sostenible, la calidad y la pertinencia serán la clave para innovar y dar más valor a nuestros estudiantes, docentes y graduados. Así como mantener la Acreditación Institucional, acreditar programas nacional e internacionalmente, ofrecer programas que se ajusten a las nuevas necesidades y expectativas de los sectores productivo y social de la región y el país.
La creatividad y el emprendimiento sostenible harán posible el desarrollo de iniciativas disruptivas en el ámbito pedagógico, social y tecnológico. Esta gestión de la innovación dará cumplimiento a la apuesta institucional de formación integral desarrollada en el Proyecto Educativo Institucional.
El nuevo Plan de Desarrollo ubica la relación de los públicos de interés en el centro, porque son ellos la razón de su existencia. Otro impulsor del crecimiento sostenible de la UNAB será la consolidación de una cultura organizacional que avance en torno a tres grandes pilares: la experiencia del cliente, las competencias de los docentes y la vocación de ser un equipo de alto rendimiento y altamente comprometido.
Para lograr que la Institución siga generando un impacto social positivo, se tendrá foco en el agenciamiento de recursos externos y la sostenibilidad financiera, lo que significa destinar los recursos a seguir avanzando en la transformación y el fortalecimiento de la docencia, investigación y extensión.
Para Eulalia García Beltrán, vicerrectora académica de la UNAB, el sector académico está inmerso en una transformación constante, todos debemos estar con un ojo puesto en lo que viene, la próxima tendencia, la siguiente evolución. Y por esta razón cada una de estas iniciativas institucionales busca que nuestras acciones sigan dejando huella en la sociedad, para que este mundo sea un lugar mejor.
