Por César Bello Hernández
cbello@unab.edu.co
Para estudiar el impacto que tendrá en el centro de Bucaramanga el comienzo
de los trabajos de Metrolínea y empezar a preparar a los ciudadanos sobre
los cambios que van a generar las obras, se hará un simulacro de variación
en la circulación vehicular y peatonal en varias calles.
Se cerrarán vías, desmontarán los pasos peatonales provisionales
y se señalizarán los paraderos como si estuvieran en ejecución
las obras del proyecto.
Está previsto cerrar toda la carrera 15 desde la avenida Quebradaseca
hasta el sur, cubriendo además toda la autopista hasta el puente de Provenza.
Es un tramo de 4.7 kilómetros que comprende la primera fase de Metrolínea,
la cual se empezará a construir en el primer trimestre del año
entrante.
Aún no se ha confirmado el día pero la fecha tentativa del simulacro
es el jueves 3 de noviembre entre las 5 de la mañana y las 8 de la noche.
Comerciantes, conductores y transeúntes de la zona han manifestado su
inquietud sobre el normal desarrollo de sus labores. Sin embargo, Félix
Francisco Rueda Forero, gerente de Metrolínea, sostiene que “la
idea es no incomodar, hacerlo en un día apropiado y que el ejercicio
nos permita tomar acciones preventivas y que no tengamos que tomar decisiones
sobre la marcha de las obras”.
Se planea que ese día la jornada laboral sea continúa y es probable
que haya ‘pico y placa’ para que el simulacro transcurra satisfactoriamente.
La estrategia se denomina ‘Bucaramanga
lista’ y está en proceso de información con la comunidad
y las empresas transportadoras. Todavía se están arreglando los
detalles para que cause los menores trastornos, informó el gerente de
Metrolínea.
