Dentro de la serie de actividades que se organizan durante el año en el marco del Seminario Permanente Ambiental (SEPA+) de la Universidad Autónoma de Bucaramanga (UNAB), una de estas fue la conferencia Problemáticas ambientales en entornos urbano, un espacio en el que, además, se dieron a conocer los nombres de los ganadores del concurso anual de fotografía.
De manera presencial o virtual los amantes de la fotografía participaron en esta conferencia, en la que estuvieron como invitados los fotógrafos César David Martínez Rodríguez, de Popayán, y Andrés David Galindo Rey, de Bucaramanga, con la moderación del periodista y también fotógrafo Pastor Virviescas Gómez, quienes hablaron sobre cómo el impacto ambiental ha sido captado por sus lentes y cómo cada vez se deteriora más nuestro planeta.
“Colombia tiene seis áreas de glaciares y hace unos años tenía 14, es decir que han desaparecido ocho. También vienen desapareciendo los picos de la Sierra Nevada de Santa Marta, estos son indicadores de lo que está pasando con el calentamiento global”, señaló con tristeza el fotógrafo Martínez Rodríguez.
“La vida marina en Colombia la deberíamos conocer antes de que deje de existir”, expresó el joven bumangués Galindo Rey. Y es que en medio de la conferencia se reflexionó también sobre cifras como que Emiratos Árabes es un país que recicla un 70 % de sus residuos sólidos, mientras que en Colombia la cifra apenas alcanza el 13 % y en Bucaramanga es mínimo: el 2,8 %.
Al cierre de la conferencia, como es habitual año a año, UNAB Ambiental reveló los nombres de los ganadores del concurso anual de fotografía 2023, así como las imágenes:
El cuarto puesto fue para Johan Santiago Fiallo, con una fotografía que evidencia una problemática ambiental muy común en el área metropolitana de Bucaramanga: el mal manejo de residuos sólidos, el cual se convierte en un foco de enfermedades y contaminación para el medio ambiente. La foto fue captada en el barrio Ciudad Bolívar de la capital santandereana.
El tercer puesto fue para Gabriela Polanco Martínez, quien hizo varias fotos de la Quebrada La Iglesia, un canal de agua que pasa por la Terminal de Transportes de Bucaramanga y el Centro de Ferias, Exposiciones y Convenciones (Cenfer), en las que se evidencia la contaminación causada por químicos que producen una gran cantidad de espuma, debido a las altas cantidades de detergentes y surfactantes.
El segundo puesto se otorgó a Laura Susana Castro Guarín, quien retrató en Cajicá, Cundinamarca, esta zarigüeya huérfana a muy temprana edad, pues su madre y hermanos murieron electrocutados. Estos marsupiales se han visto muy afectados por la pérdida de su hábitat, la falta de información y los prejuicios de belleza. Las zarigüeyas son parte de la fauna que se ha visto obligada a habitar espacios urbanos; esta es una fotografía que puede parecer tierna por el animal bebé, pero realmente detrás de ella hay un proceso largo y complicado, pues su rehabilitación no es sencilla.
El primer puesto lo ganó Ángela Victoria Monsalve Villa y su foto devela el impacto ambiental y paisajístico de la minería aurífera de veta (filón) tanto en la zona urbana como en la zona rural de Marmato, Caldas. Una práctica que conlleva consecuencias que reflejan el inadecuado manejo de los estériles; la utilización de químicos en la decantación de los metales preciosos y pulverización de la roca en los molinos, la mala disposición de residuos y en la mayoría de los casos el vertimiento directo a las fuentes hídricas, situaciones que afectan y amenazan directamente los ecosistemas alterándolos de manera significativa, en el municipio considerado “Pesebre de Oro de Colombia”.
Estas fotografía serán expuestas en eventos dedicados a la protección del ambiente en Santander y en la siguiente edición de la Feria del Libro de Bucaramanga, Ulibro 2024.
