Seleccionar página

Calles de Bucaramanga, un desastre

Jul 15, 2005 | Facultad de Ciencias Sociales, Humanidades y Artes

Textos y fotos Pastor Virviescas Gómez
pavirgom@unab.edu.co

Si su carro o motocicleta está en perfecto estado y no se ha ‘comido’
ningún hueco, tranquilo, no siga leyendo, usted está de paso.
Pero si por el contrario es de esos conductores o pasajeros que ya se saben
de memoria la ubicación de cada bache en cada calle, carrera y avenida,
bienvenido a la sucursal de la Luna en La Tierra, la ciudad de Bucaramanga.

Los cráteres que tapizan esta superficie están distribuidos de
manera equitativa, sin distingo de estrato, del 1 al 6, al acecho de rines,
tijeras, amortiguadores, ejes, suspensiones y hasta accidentes, porque quien
va distraído y trata de esquivarlos puede chocar con su vecino de carril,
como ocurre con el bache que hay saliendo del viaducto García Cadena,
costado sur-norte, una vía de alta velocidad en la que cualquier maniobra
resulta peligrosa.

El más reciente diagnóstico elaborado por la misma Administración
municipal señala que el 80 por ciento del asfalto de la ciudad está
deteriorado.

¿Cuánto cuesta una solución a este mal? Según el
ingeniero César Granados, funcionario de la Secretaría de Infraestructura,
encargado del mantenimiento de la malla vial, se requeriría de una cifra
entre $20.000 y $25.000 millones de pesos, dinero que el Municipio de Bucaramanga
no tiene.

El Concejo de Bucaramanga espera haber encontrado la solución en la
propuesta aprobada el pasado 11 de julio, según la cual debe haber un
Acuerdo Municipal que comprometa recursos de la sobretasa a la gasolina de aquí
al año 2014. De allí saldrían casi $53 mil millones para
Metrolínea y los tan esperados 20 mil millones para reconstruir las vías.

La Secretaría de Infraestructura ha destinado $2.250 millones para invertir
durante el año 2005 en ese propósito, pero la dependencia reconoce
que esta plata apenas alcanza para intentar remediar la emergencia.

En la actualidad, según el ingeniero Granados, se están llevando
a cabo diez programas de reparcheo y dos de interventoría que supervisan
su cumplimiento.

Los sectores cobijados son los siguientes: Del Colegio La Salle
hasta El Bueno y de allí hasta Cenfer, la salida a Cúcuta en un
tramo de dos kilómetros, la calle 45 desde la Cárcel Modelo hasta
Quinta Estrella, barrios Kennedy, Altos del Kennedy y Balcones del Kennedy,
calle 34 entre las carreras 21 y 9 -principalmente en la Plaza de Mercado del
Centro-, otros sectores de la Comuna 15 (Centro); Cabecera del Llano, Sotomayor,
Terrazas y La Floresta en la Comuna 12; San Alonso, Los Pinos y La Aurora en
la Comuna 13; Plaza de La Concordia y barrio Candiles en el sector del calzado.
Pero son “apenas” $240 millones.

El criterio que se ha aplicado por la Secretaría es que estos son sectores
comerciales y vías principales con considerable flujo vehicular. La aspiración
es recuperar el 70% de los sectores mencionados, dijo Granados.

Un segundo frente de trabajo comprenderá los barrios Provenza, Fontana,
Diamante, San Luis, Lagos del Cacique, Altos del Lago (para el que hay destinados
$130 millones, incluida interventoría), mientras que un ‘plan tapahuecos’
atenderá el ‘rosario’ de baches que hay en la llamada autopista
a Piedecuesta hasta el puente de Provenza, con un costo de 32 millones de pesos.
El conjunto de las obras, según promesa del ingeniero Granados, debe
estar terminado a finales del mes de agosto (en menos de 45 días).

La Administración Municipal tiene una excusa a la hora de tomarle cuentas
por la crisis y dice, según Granados, que hay barrios de la ciudad como
Provenza, La Victoria, La Salle, Nápoles y La Feria, que hace más
de 15 años no reciben mantenimiento; es decir, que el problema es una
herencia de los cinco alcaldes anteriores.

Los cálculos oficiales

“La inversión aproximada de la Alcaldía de Bucaramanga
entre 2005 y 2007 es de $9.040 millones para mantenimiento y ampliación
de vías urbanas, $1.150 millones para mantenimiento y ampliación
de vías rurales y $3.200 millones de presupuesto preliminar para otras
vías”, según cifras entregadas por la Secretaría
de Infraestructura y publicadas por 15 en mayo de 2004.

En esa misma edición se dijo que el costo aproximado de repavimentar
el 40% de la malla vial urbana (160 kilómetros) sería de $112
mil millones.
A final de 2003, la Administración Municipal reveló que pavimentar
un kilómetro de vía en Bucaramanga costaba 700 millones de pesos.

Ir al contenido