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Comercio de orquídeas santandereanas tiene camino por recorrer

Sep 29, 2008 | Facultad de Ciencias Sociales, Humanidades y Artes

Por Paula Alejandra Carrillo Pe?a
pcarrillo2@unab.edu.co

Caras de sorpresa abundan en las exposiciones de orqu?deas porque la variedad de tama?os, colores y formas, as? como el precio de algunas de ellas, sorprenden a cualquier incauto.Adem?s del orgullo que producen las aproximadamente 3.000 especies que tiene Colombia y que la sit?an en los primeros lugares mundiales de la biodiversidad, tambi?n lo hace el que la Cattleya trianae sea considerada flor nacional.

Sin embargo, algunas orqu?deas est?n en peligro de extinci?n, como la nativa de Santander, Cattleya mendelli. Jes?s Orlando Rinc?n, presidente de la asociaci?n departamental de orquideolog?a, Asorquisan, afirma que ?aqu? llegan personas de otros lados y se las llevan, entonces en exposiciones vemos flores muy buenas y decimos ??de d?nde son? De Santander?. Est?n ganando premios internacionales, son de ac? y los santandereanos no sabemos d?nde estamos parados?.

Por eso, el principal objetivo de la Asociaci?n es, seg?n ?l, la producci?n de orqu?deas para la conservaci?n. Sus cerca de 25 asociados tambi?n se re?nen para compartir semillas, conocimientos sobre cultivos y realizar exposiciones, pero de ?stos son contados los cultivos industriales. ?En in vitro siempre se trabaja un 30% para el campo, que va a estar protegido, y un 70% que tiene un fin comercial, para podernos sostener?, contin?a.

Para ?l, en Santander solamente hay dos cultivos industriales que son el de Antonio Ahogado, Elenita Orqu?deas, y el de David Fl?rez, La Orqu?dea.


Crecimiento ?en vidrio?

La siembra de semillas de orqu?dea en frascos de laboratorio se realiza porque su crecimiento en ambiente natural es complicado: son propensas al contagio de hongos y bacterias y por tal motivo, pueden morir f?cilmente.

Ahogado, propietario de un cultivo de entre 45.000 y 50.000 plantas, asevera: ?De cinco millones de semillas que se esparcen en un momento dado, menos de cien tienen la fortuna de germinar en un sitio espec?fico?. Esto tambi?n debido a que no cuentan con endosperma, su ?comida? ?mientras comienzan a hacer fotos?ntesis para adquirir el alimento ellas mismas usando la luz del sol?, complementa.

?Ayud?ndolas? en este proceso, la probabilidad de que salgan adelante aumenta porque se mantienen en frascos con nutrientes en un ambiente as?ptico, los cuales se manejan con equipos esterilizados y guantes de l?tex como si se tratara de una cirug?a.

Marta Chac?n, directora del Laboratorio de Cultivos y Tejidos Vegetales de la Universidad de Santander, Udes, siembra semillas que proporciona Asorquisan para hacer un banco de orqu?deas nativas. Ella asevera que con este m?todo, la germinaci?n se da en un 98%, comparado con el 5% de forma natural. No obstante, la singularidad de los equipos y la infraestructura necesaria hacen que no cualquiera pueda llevarlo a cabo.

La investigadora explica que se necesitan m?quinas para esterilizar material, de m?s o menos unos tres millones de pesos; una c?mara de flujo laminar, con filtros que eliminan hongos y bacterias, de entre siete y diez millones, adem?s de sales, hormonas y vitaminas por un total de tres millones para un a?o de duraci?n, aplicados a la cantidad que tiene all?: 546 recipientes con entre cinco y veinte plantas cada uno, dependiendo de su tama?o.

Como los ni?os que nacen prematuramente, las peque?as orqu?deas requieren de una c?mara de incubaci?n que mantiene una temperatura estable, como 27 grados cent?grados y simula per?odos de luz como el d?a y la noche. Al costo de los materiales se debe a?adir el consumo de energ?a y tambi?n el tiempo de las ?madres? de los ?beb?s? que crecen all?.

Ahogado, quien cuenta con laboratorio propio, afirma respecto a su costo de producci?n: ?la inversi?n m?s alta es la del know-how, es decir, saber c?mo hacerlo. A una persona que no conozca de eso, se le van a morir. En efectivo no estoy invirtiendo mucho, pero vendo mi experiencia de 40 a?os y esos conocimientos no se empe?an porque son b?sicamente el negocio?.Cuando se tienen por afici?n, los costos se centran en la compra de la planta, los nutrientes y la adecuaci?n de un espacio con suficiente luz. La gama de precios va ?desde quince o veinte mil pesos hasta las que tenemos ac?, de ochenta ? 100 mil pesos. Pero una orqu?dea puede valer 500 mil, un mill?n de pesos?, dice Giomar Mari?o, due?a del vivero Proplantex y expositora en la Exhibici?n de Orqu?deas y Flores Tropicales que tuvo lugar del 18 al 21 de septiembre en el Parque de las Mejoras P?blicas.El monto puede variar dependiendo del tama?o de la flor, los colores, la especie y la rareza de la misma.?

Cuesti?n de tiempo

El proceso que comprende desde la polinizaci?n y germinaci?n in vitro hasta la floraci?n es de aproximadamente siete a?os. Paciencia y curiosidad por aprender a cuidar cada planta es el valor agregado que aporta el cultivador.

Dependiendo de las oportunidades de negocio, el comercio de orqu?deas adquiere distintas formas: la venta de especies nativas, de h?bridos (la mezcla de ellas), de flor cortada para florister?as y de peque?as plantas ?en frascos?.

Ahogado asegura que en Colombia esta ?ltima modalidad no es tan exitosa por la falta de experiencia de los coleccionistas al trasplantarlas al aire libre. No obstante, sostiene que el negocio resulta rentable en cuanto a h?bridos y sus clientes principales son las amas de casa: ?Producimos plantas de colores llamativos para estos compradores porque aunque se est? formando un mercado para aficionados serios que buscan diferentes especies para sus colecciones, ?ste no es tan grande como el de la gente que no sabe de orqu?deas y las llevan porque las ven lindas?.Pa?ses como Estados Unidos tienen la delantera en este tipo de producci?n, por lo que Colombia no tendr?a cabida en el mercado mundial debido a la competencia.En cambio, los coleccionistas apetecen m?s las especies nativas, es decir, las que no han sido mezcladas con otras. Pero las regulaciones para exportar dichos ejemplares deben regirse por la Convenci?n sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Flora y Fauna Silvestres (Cites), lo que hace m?s complicada la adaptaci?n del producto para el ?p?blico? mencionado.Sus preceptos no aplican para semillas, polen, tejidos obtenidos in vitro y transportados en frascos est?riles, ni para flor cortada, pero la exportaci?n en este sentido a?n no se est? desarrollando en el pa?s.Ahogado asegura al respecto: ?Hay tr?mites engorrosos, las plantas deben tener permisos especiales y la ra?z desnuda, o sea, no pueden haber sustratos. Es un mercado muy controlado?.

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