Seleccionar página

Editoriales universitarias enfrentan retos

Mar 7, 2005 | Institucional

Por Ivonne Rodríguez

Los canales de distribución, la infraestructura, la comercialización, la actualización vía Internet y la inversión en promoción son las dificultades a las que se enfrentan las editoriales universitarias, según coinciden sus directores.

A propósito de la Tercera Feria del Libro de Bucaramanga, Ulibro 2005, representantes de 15 editoriales universitarias del país e integrantes de la Asociación de Editoriales Universitarias de Colombia (Aseuc) realizaron el pasado viernes en la Universidad su reunión de junta directiva. Algunos de estos representantes dieron a Vivir la UNAB una visión sobre el panorama de la industria editorial de las academias.

Sin ánimo de lucro

Cifras del informe que publicó Aseuc en 2003 demuestran que la actividad editorial se desarrolla con poco personal, que la tendencia es a imprimir con terceros y que los presupuestos estables se encuentran en las universidades privadas. Por su parte, el último informe de la Cámara Colombiana del Libro (CCL) indica que gran parte de la producción de los centros editoriales universitarios no se comercializa y que sus principales canales de ventas son sus librerías o puntos de venta propios.

Esta situación responde a que el objetivo de las editoriales universitarias es diferente al comercial. Así lo asegura Boris del Campo, jefe de medios audiovisuales y publicaciones de la Universidad de La Salle de Bogotá, quien reitera que las universidades "son las primeras encargadas de difundir el conocimiento académico que se produce al interior y en diversas ramas del conocimiento".

Juan Felipe Córdoba, secretario de la Junta Directiva de Aseuc y director de la editorial de la Universidad Colegio Mayor de Nuestra Señora del Rosario, explica que la industria editorial universitaria inició hace 12 años con el objetivo de dar a conocer la producción intelectual y que en estos momentos va por buen camino. Con relación al material que se muestra en las ferias, Córdoba agrega que "se nota el cambio respecto a hace diez años".

Frente al estado actual de estas editoriales, Stella Valbuena, presidenta de la Junta y también directora de la editorial de la Universidad Católica de Colombia, opina: "Las editoriales universitarias se consolidan, se están profesionalizando. Nuestra expectativa es superar las dificultades que se nos presentan, por ejemplo en comercialización e incursionar en el ámbito nacional e internacional. Creo que estamos en un momento de despegue".

Pero sin ánimo de pérdida

Las editoriales universitarias son cons-cientes de que no pueden competir con las editoriales comerciales. Esto lo afirma Martha Helena Esguerra, directora de la editorial de la Universidad de los Andes, quien explica que las condiciones para la competencia divergen con relación a la vida del libro: "Para las editoriales comerciales, si uno de sus libros no se vende en seis meses, se pica (pierde); mientras que para las universitarias sus libros tienen una duración de cuatro años".

Aunque la comercialización de las editoriales universitarias no es masiva y por tanto, sus ingresos no son elevados, las editoriales reconocen que la inversión se recupera en beneficios intangibles. "La producción tiene que ver con la imagen de la universidad. Éste es un valor agregado", dice Juan Felipe Córdoba. En el mismo sentido se manifiesta Stella Valbuena: "El conocimiento produce utilidades que no se representan en pesos".

Para enfrentar las dificultades en producción y venta, estas editoriales desarrollan estrategias en búsqueda de soluciones.

Boris del Campo indica que la agrupación de las editoriales en Aseuc es una de las soluciones: "Con esto se reducen costos y se tiene representación en eventos como ferias". Otra es la producción de textos interesantes, señala Martha Helena Esguerra: "Se habla con los estudiantes para saber qué es lo que les interesa". Y Valbuena comenta que otra opción de equilibrio económico se logra con los modelos de gestión de las editoriales: "Con esto nos hemos dado cuenta de que las mismas universidades tienen a los autores y no necesita salir a buscarlos".

Ir al contenido