Energías alternativas, el futuro

Por Ricardo Jaramillo P.
La necesidad de ¿madurar¿ la industrialización de las energías alternativas y la importancia que tiene el desarrollo sostenible en la labor de las grandes plantas de producción, fueron las principales conclusiones de la tercera jornada técnica del Programa de Ingeniería en Energía de la UNAB.
La actividad, que se cumplió en el Auditorio del Edificio de Ingenierías el 1 y 2 de noviembre, reunió a docentes y estudiantes del programa para escuchar conferencias de expertos en la materia, como Luis Henao Cardona, del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Territorial; Carlos Sarmiento Sánchez, del Instituto Colombiano del Petróleo (ICP); Jesús Aristizábal Fernández de la Corporación Tekne y Nelson Fernando Angulo Pedrozo, ingeniero líder de procesos del Departamento de Apoyo Técnico a la Producción de la Gerencia Complejo Barrancabermeja de Ecopetrol.
Vivir la UNAB dialogó con Angulo Pedrozo acerca del tema de la jornada y sobre las expectativas mundiales en torno al futuro del petróleo.

¿A qué hace alusión el desarrollo sostenible en materia energética?
A poder utilizar los recursos con los que cuenta una región o un país para generar energía y ésta a su vez utilizarla en las plantas productivas generando un mínimo impacto en el ambiente. Las grandes empresas cada vez son más conscientes del impacto ambiental que tienen en la comunidad, en la fauna y la flora y lo que básicamente buscan es reducirlo sin olvidarse del margen productivo que es lo que hace rentable cualquier planta productiva.

Cuando se habla de energía el gran protagonismo se lo lleva el petróleo, del que dicen los expertos alcanzará antes de finalizar el año el precio récord de 100 dólares por barril. ¿Qué relevancia tiene esto en el mundo?
A pesar de que hoy los precios del crudo están a un nivel muy elevado, lo que se vislumbra a 40 o 50 años es que los pozos o hallazgos importantes de petróleo empezarán a declinar, o sea que en esa época estaremos pensando en alternativas de energía diferentes a la de los combustibles fósiles; hoy ya hay muchos desarrollos, algunos a nivel piloto o de laboratorio y unos pocos a nivel industrial porque los costos no los hacen competitivos respecto a la energía producida por los combustibles fósiles. En Ecopetrol somos conscientes de la situación, sabemos que para el 2015 tendremos pocas reservas y si antes de eso no hacemos hallazgos exploratorios, vamos a tener que importar crudo; esto ha obligado a la empresa a ampliar sus horizontes, estamos buscando alternativas como los biocombustibles.

Ante el panorama de un petróleo que escasea y unas energías alternativas aún en experimento, ¿eso no es como si se nos estuviera haciendo tarde?
Sí, porque indudablemente en el mundo la primera opción la sigue teniendo el petróleo. El tema de las fuentes alternativas de energía comenzó hace poco tiempo y por eso no están maduras en materia competitiva pero técnicamente ya están probadas, sean eólica, hidráulica o biomasa convertida en energía; en lo que se está trabajando fuertemente es en reducir los costos de producción para que sean competitivas. El tiempo que queda para que empiecen a declinar las fuentes de energía tradicionales es corto, pero creo que las alternativas van a tener un crecimiento importante en los próximos años.

¿Cómo ha sido el proceso de socialización de los biocombustibles en Colombia?
Todo cambio al principio genera una resistencia. La adición del etanol a la gasolina se hace en Brasil desde hace casi 25 años y está completamente probado que no presenta ningún problema, incluso allá la mezcla tiene un porcentaje de biocombustible del 25%, mientras que en Colombia es sólo del 10%. Las inquietudes de la comunidad surgen por desinformación, quizás no se ha dado toda la difusión del caso, Ecopetrol ha emitido muchos comunicados oficiales, pero quizás no han llegado a todos los usuarios para aclarar que no hay ningún problema con el uso de este tipo de combustibles.