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UNAB firmó convenio por los desplazados

Dic 18, 2006 | Institucional

Por Ricardo Jaramillo P.
El rector de la UNAB, Alberto Montoya Puyana, fue el encargado de firmar en representación de la Universidad el convenio de cooperación suscrito entre tres instituciones de Educación Superior de la ciudad y la oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), para otorgar becas a diez jóvenes habitantes de los asentamientos de población desplazada ubicados en el Área Metropolitana de Bucaramanga.

El convenio fue firmado el lunes 11 de diciembre en la sede de Acnur. Además del rector de la  UNAB, también firmaron fray Carlos Díaz, rector de la Santo Tomás; monseñor Néstor Navarro Barrera, rector de la Pontificia Bolivariana y Julio Roberto Meier, representante en Colombia de Acnur.

La firma del acuerdo también contó con la asistencia de Alfonso Gómez Gómez, vicepresidente de la Junta Directiva de la UNAB; Eulalia García Beltrán, vicerrectora Académica de la UNAB; el padre Francisco Vargas Pieschacón, vicerrector de Pastoral de la UPB; Roberto Mignone, representante adjunto de Acnur en Colombia; Filipo Rossi, coordinador de Acnur en Bucaramanga, y Nívea Santarelli Franco, coordinadora del Plan Integral Único de atención a la población desplazada (PIU) de la Gobernación de Santander.

El convenio beneficiará con diez becas del 100% a igual número de jóvenes desplazados, quienes además recibirán mensualmente un auxilio de $300.000 para gastos de transporte, alimentación y materiales de estudio.

De igual forma, los signatarios se comprometen entre otros aspectos a crear un sistema de tutorías con docentes y estudiantes de últimos semestres de las facultades de Psicología, gestionar subsidios mediante un sistema de padrinos con la empresa privada y desarrollar una estrategia de sensibilización y conocimiento de la problemática del desplazamiento al interior de las Instituciones y en la comunidad.

“Es el primer paso”
“Con la firma del convenio demostramos algo muy importante y es la sensibilidad de las universidades respecto a problemas graves que el país está viviendo con el tema de desplazados; el compromiso es poder ofrecerles a un grupo de jóvenes la posibilidad de acceder a la educación superior para de esta forma entregarles herramientas para que ellos y sus familias tengan posibilidades positivas hacia el futuro”, dijo el rector de la  UNAB.

Montoya Puyana agregó que éste es solo el comienzo de un proyecto que debe crecer. “La iniciativa necesariamente se tendrá que multiplicar, porque parte del compromiso tanto de Naciones Unidas como de las universidades, es promocionar este tema en el sector privado con el fin de buscar recursos que permitan multiplicar este convenio”.

Por su parte, el representante adjunto de Acnur afirmó que “con esto se logra dar una esperanza a los jóvenes desplazados que están terminando su bachillerato y que tienen la posibilidad de empezar una carrera universitaria, porque normalmente muchos jóvenes en condición de desplazamiento después de terminar el bachillerato tienen que abandonar los estudios por falta de recursos, ahora para algunos de ellos nace la esperanza de seguir avanzando en su proyecto de vida”.

Y agregó: “La idea es que Acnur y las universidades hagamos los esfuerzos necesarios durante el primer año del proyecto para buscar más contrapartes que quieran sumarse, podrían ser empresas privadas que quieran financiar parte de estos costos o actores del Estado, entonces es una experiencia piloto que empieza con un número limitado de estudiantes pero esperamos que se pueda en un futuro ampliar”.

“Esto es un proyecto inicial, hemos encontrado una disponibilidad muy importante por parte de estas tres universidades privadas, pero esto no impide que en el futuro se pueda trabajar con la universidad pública, diría que es el ideal del proyecto, porque se podría ampliar la cobertura de beneficiados”, concluyó Roberto Mignone.

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