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Becado para ir a Australia y ahora a Brasil

Jun 12, 2007 | Institucional

Por Pastor Virviescas Gómez

Navarro Mancilla formó parte de los 20 médicos latinoamericanos seleccionados entre todos los que atendieron la convocatoria para una beca de participación en el seminario. Los requisitos eran ser psiquiatra de niños y adolescentes, trabajar en investigación y tener menos de 40 años. En su condición de médico general, aplicó y salió escogido.
¿Hice mi año rural y he seguido trabajando en el Grupo de Investigación de Neuropsiquiatría de la UNAB, que está a cargo del profesor Germán Rueda, quien ha sido el mentor y nos ha abierto las puertas para que investiguemos, presentemos trabajos y hagamos rotaciones en otras universidades del mundo, lo cual es una muy buena vaina¿, dice.
Este joven fue al seminario de Brasil con el propósito de aprender a hacer investigación en Psiquiatría de niños y a la vez para presentar, a nombre del Grupo de Neuropsiquiatría de la UNAB, un trabajo sobre la prevalencia del trastorno obsesivo-compulsivo y la asociación con trastorno depresivo mayor en adolescentes.
¿Lo obsesivo-compulsivo se caracteriza porque los niños tienen dos cosas importantes: obsesiones y compulsiones. Las obsesiones son pensamientos que de manera recurrente se le vienen a la mente y generalmente son negativas. Los niños responden a esta obsesión con una compulsión. Esto sucede por ejemplo cuando el niño al pasar por una iglesia se le mete la idea de persignarse; luego de hacerlo, se calma. También cuando va caminando y evita pisar las rayas o no toca a nadie porque piensa que los demás pueden tener bacterias¿, explica.
¿Nosotros vimos la asociación con el trastorno depresivo mayor. Estas dos entidades tienen mucha frecuencia en los adolescentes en Bucaramanga, tal como lo han demostrado los estudios que hemos realizado en la UNAB. Lo que no sabemos es cómo es la relación: si el niño que tiene depresión puede llegar a tener Trastorno Obsesivo-Compulsivo (TOC) o el que tiene TOC  llega a tener depresión¿, agrega.
Al seminario asistieron cinco figuras internacionales de la Psiquiatría en niños y adolescentes, que hicieron las veces de tutores, entre los que se destacó el mexicano Andrés Martin, director del Departamento de Psiquiatría de la Universidad de Yale, Estados Unidos.
¿Es necesario investigar en Psiquiatría infantil porque nos toca directamente ya que la enfermedad mental en jóvenes y adolescentes es muy grande y eso se ve en los adultos. Detectando en pequeños podemos tener un mejor tratamiento o al menos un mejor pronóstico y podremos darnos cuenta de que podemos tener un tratamiento farmacológico o una psicoterapia con un adolescente para que en un futuro no sea peor la situación¿, argumenta Navarro Mancilla a la hora de resaltar la importancia de su trabajo.
Califica como enriquecedor este nuevo fogueo porque le permite reforzar sus conocimientos. ¿Toda mi experiencia ha sido ganada en el Grupo de Investigación gracias al profesor Rueda. Es afianzar un poco más las cosas, buscar la forma de investigar otras patologías mentales y evaluar cómo lo estamos haciendo¿, dice.
En septiembre de 2006, Navarro Mancilla también se hizo acreedor a una beca para viajar a Melbourne (Australia), donde participó en el XVII Congreso Mundial de Psiquiatría de Niños y Adolescentes.
Su trabajo en esa ocasión consistió en investigar la ¿prevalencia de Trastorno Obsesivo-Compulsivo en niños y adolescentes de Bucaramanga, y su asociación con la doble condición trabajo-estudio¿, un título extenso que se resume en el hallazgo de obsesiones (pensamientos intuitivos) y compulsiones en niños escolares de la ciudad, con particularidades como la mayor incidencia en niñas y una frecuencia más alta que incluso Estados Unidos.
Fue el primer colombiano en ganarse la beca Donald Cohen, la cual le dio derecho a la inscripción, alojamiento y alimentación.

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