Por Ricardo Jaramillo P.
Con un taller realizado el lunes de la semana pasada en la UNAB, se ratificó
la conformación del Consejo Departamental de las Artes y la Cultura Cinematográfica
(Cdacc), organismo que se encargará de velar por el estímulo y
el respaldo de la cultura audiovisual de la región.
Al encuentro asistieron realizadores, productores y representantes de los exhibidores
de cine de Santander; la coordinadora de Programas de Impacto Regional de la
Dirección de Cinematografía del Ministerio de Cultura, María
Cristina Díaz y el decano de la Facultad de Producción de Artes
Audiovisuales de la UNAB, Hernán Humberto Restrepo, quien es el representante
de las universidades en el organismo.
El Cdacc se instituyó en las regiones a partir del año 2003,
cuando la Ley 814 crea el Consejo Nacional de las Artes y la Cultura Cinematográfica
(Cnacc), como organismo gestor y canalizador de herramientas para el estímulo
de la industria cinematográfica en el país. En el Consejo Nacional
tiene participación un delegado de los consejos regionales como el que
se acabó de crear en Santander.
Según María Cristina Díaz, el taller realizado en la UNAB
no sólo buscaba organizar el Consejo Departamental en cuanto a su estructura,
sino "realizar un ejercicio de planeación estratégica que
consiste en revisar el actual Plan de Desarrollo de Santander, ubicar en qué
ejes podría involucrarse el tema de lo audiovisual e incluso coordinar
la posibilidad de destinación de algunos recursos".
La funcionaria explicó que el ente encargado de destinar estos recursos
sería la Secretaría de Desarrollo Social del departamento y agregó
que "el Cdacc también realizará un diagnóstico y un
inventario local de lo que se requeriría a futuro para el sector y diseñará
un plan de trabajo que será involucrado más adelante en el Plan
de Desarrollo Cultural de la región".
La UNAB, protagonista
Díaz también insistió en la importancia que juega la Universidad
en el Consejo. "El papel de la UNAB es fundamental porque es quien tiene
el panorama de los procesos de calificación de los agentes, de los productores,
de los directores y también tiene a su cargo dimensionar lo que significa
el oficio, su quehacer y ahí el aporte del delegado va a ser fundamental".
Concluyó que el panorama de la cultura audiovisual en la región
en este momento puede percibirse como "disperso", pues sólo
se aprecian iniciativas de particulares o de entidades. "Pero rescato varias
cosas: primero, una voluntad de trabajo asociativo entre instituciones, universidades,
salas de exhibición alternas, los procesos de formación de público,
etc.; en segundo lugar, un semillero de talentos interesante, no es gratuito
que haya una facultad dedicada a la formación en producción audiovisual,
y en tercer lugar, hay una voluntad política para desarrollar este tipo
de escenarios que se espera logren recursos a favor del sector".
Por su parte, el decano Hernán Humberto Restrepo, dijo que el Cdacc
tiene varias prioridades: "la más importante es consolidarnos como
Consejo; la segunda, es promover la cultura cinematográfica y la tercera
es impulsar la investigación audiovisual. Nosotros tenemos cuatro proyectos
en esta materia (Siete miradas a la imagen, La masculinidad en el cine, El rescate
del patrimonio audiovisual santandereano y Santandereanos ilustres) y todos
le apuntan a un objetivo primordial, la formación de realizadores y la
formación de público".
