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Por Helga Moreno Collantes

hmoreno@unab.edu.co

?Intangibles son las cosas que no se pueden negociar, porque son irrecuperables para las personas como la vida, el territorio, el tejido social, las costumbres y la relaci?n con el entorno natural?, as? comienza el documental titulado ?Zona despojo?? realizado por los? realizadores Daniel Alfonso Le?n y Mario Ni?o Villamizar de 28 y 32 a?os, respectivamente. En 30 minutos resumieron las facetas de las 500 familias afectados por la represa que generar? energ?a el?ctrica: Corintio, La Playa, Tablazo, La Estrella, 25 de agosto y Pe?a morada, son las comunidades pertenecientes al municipio de Betulia que protagonizan el documental.

Los realizadores compilaron en im?genes las venturas y desventuras de quienes habitan las 7 mil hect?reas del valle que se extiende entre el r?o Chucur?, el r?o Sogamoso y el pie de monte de la Serran?a de la Paz.

En este registro se encuentran la abundancia e incertidumbre de las familias que deben abandonar? su herencia econ?mica y cultural para dar paso a la represa que alimentar? la central el?ctrica.

Un trabajo para viajeros

El Programa de Paz y Desarrollo del Magdalena Medio y la Junta de Acci?n Comunal de La Gloria, aportaron los recursos para la realizaci?n de ?Zona despojo?.

Provistos de c?maras y micr?fonos los productores de este documental, hicieron maletas y se fueron por las trochas a recoger testimonios; se embarcaron en chalupa por el r?o, hicieron caminatas de m?s de seis horas, sintieron las exigencias del clima tropical lluvioso de los Andes, comieron sancocho de gallina en olla comunitaria, aprendieron de agricultura y ganader?a mientras consignaban las voces disidentes del macro proyecto energ?tico.

De mayo a agosto Daniel Alfonso Le?n, oriundo de San Vicente de Chucur?, qui?n conoce los altibajos de las carreteras del Magdalena medio y la ubicaci?n de los testimonios para el documental, se encarg? de establecer los puntos de encuentro y los personajes que representar?an a la comunidad. Mientras tanto Mario Ni?o Villamizar, dispuso desde Bucaramanga los aspectos t?cnicos de la producci?n y previ? los equipos necesarios para la grabaci?n que realiz? durante seis fines de semana.

D?o din?mico

Adem?s del gusto por la composici?n de im?genes, este equipo de productores comparte la necesidad de contar historias invisibles en los medios de comunicaci?n.

Daniel ?chucur??, como se autodenomin?, es historiador de la Universidad Industrial de Santander, fot?grafo y ambientalista; entiende los procesos de desarrollo social unidos al entorno geogr?fico, de tal forma que el paisaje m?s que un tel?n de fondo, es una evidencia expl?cita de los procesos humanos. Su diccionario particular gira en torno a la palabra territorio y su frase recurrente es: ?V?monos para San Vicente de Chucur??.

La raz?n que lo motiv? a realizar este trabajo fue registrar? ?la riqueza paisaj?stica de la regi?n, la biodiversidad, la memoria de esa comunidad, y lo m?s grave, la lentitud de Isagen (empresa de servicios p?blicos que genera y comercializa electricidad en Colombia) para conciliar con la comunidad, pues no ha dicho c?mo ni cu?nto va a reparar el desplazamiento de las comunidades afectadas?, dijo el historiador.

Mario Ni?o, realizador audiovisual de la Escuela de Cine Black Mar?a (Bogot?) es docente de la facultad de Radio y Televisi?n de la Universidad Manuela Beltr?n. Considera que la raz?n primordial del g?nero documental es permitir que quienes no tienen acceso a los medios de comunicaci?n expresen sus necesidades: ?Hicimos un documental para la comunidad de Betulia, para los campesinos de la ribera del Sogamoso, basados en el compromiso social que exige generar movilizaci?n y reflexi?n a partir del desalojo de un pueblo?. La primera producci?n de ?ste bumangu?s, conocida en los cineclubes, Internet y festivales de video internacional y nacional fue ?Cumbia urbana?, treinta minutos de presente y pasado de los seguidores de este g?nero musical propio de Am?rica Latina. En esta realizaci?n entendi? que el video es una herramienta indispensable para acompa?ar los procesos sociales, cosa que le permite el formato documental, sin embargo, denunciar la desigualdad social no es su principal pasi?n audiovisual, combina la docencia con la realizaci?n de video arte experimental y argumental: son breves historias cargadas de s?mbolos, en las que mezcla realidad y ficci?n.

Documentando la incertidumbre

El prop?sito de ?Zona despojo? es abrir las reuniones veredales y municipales de las comunidades afectadas, luego de que en junio de este a?o, el ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo diera la licencia de construcci?n a la compa??a Isagen.

El contraste entre el f?rtil valle que muestra el documental y los temores del futuro que se avecina, pone a un lado de la balanza a las familias afectadas? y en menor proporci?n, el beneficio energ?tico del macro proyecto

A medida que transcurre la historia, los testimonios de l?deres comunales explican la transformaci?n del paisaje, el exuberante valle se va transformando en un hueco de 7 mil hect?reas, dispuesto naturalmente para albergar la represa.

En medio del derroche de vida y abundancia de la regi?n, los realizadores, insertan im?genes suministradas del dragado de tierras y deforestaci?n en el r?o Sin?, para construir el embalse de Urr? 1 en el departamento de C?rdoba. As? el video documental reafirma su postura cr?tica y convierte a los afectados en v?ctimas del desarrollo energ?tico.

La otra cara de la moneda

A los realizadores de ?Zona despojo? no les parece que la voz de Isagen sea importante para el documental, el objetivo de ?ste, fue propiciar el debate entre las comunidades afectadas. Sin embargo: ?intentamos hablar con el gerente Luis Fernando Rico Pinz?n, pero no fue posible, como nos urg?a presentar el testimonio de la comunidad, dejamos a un lado a la empresa?, dijo Ni?o Villamizar.

El proyecto Hidroel?ctrica del Sogamoso (Hidrosogamoso) seg?n Isagen iniciar? en diciembre de 2013 e ir? hasta noviembre de 2008. 21 mil hect?reas ser?n afectadas, 7 mil con la represa del r?o Sogamoso y el resto como ?rea de influencia. Pretende ser el tercer proyecto energ?tico del pa?s generando 800 megavatios, una inversi?n de mil 200 millones de d?lares y? tres mil 500 empleos directos. Isagen hasta el momento cuenta con la aprobaci?n del ministerio de Minas y Energ?a, pero a?n no ha empezado con los estudios de impacto ambiental.

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