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Notas sobre un viaje académico en Cuba

Jul 31, 2013 | Institucional

El Encuentro Internacional sobre Autismo e Inclusión, celebrado la primera semana de julio en el Palacio de Convenciones de La Habana, Cuba, fue el escenario que convocó maestros, especialistas y familias de 21 países interesados en discutir y aprender sobre la atención escolar de niños y niñas con trastorno del espectro autista (TEA), con el respaldo de AMEE-OMEDI: Asociación Mundial de Educación Especial – Organización Mundial de Educación, Estimulación y Desarrollo Infantil y el COMAU: Consejo Mundial de Académicos e Investigadores Universitarios.

En esta oportunidad dos profesores de la Facultad de Educación: Diego Enrique Báez y Gloria Sierra Delgado, contamos con la fortuna de poder participar, y sin lugar a dudas la experiencia abrió nuevos horizontes para pensar y reflexionar sobre una escuela que considere las condiciones particulares de los niños que acoge y les ayude en la medida de sus propias posibilidades, a construir un proyecto de vida digno.

La agenda incluyó cursos internacionales, visitas especializadas a centros educativos y paneles de expertos de varios países. Por Colombia, las profesoras Gloria Sierra y Adriana Jiménez presentaron la ponencia: La atención educativa del estudiante con TEA en el aula regular. Desafíos y oportunidades. 

A diferencia de muchos países en Latinoamérica, los niños con TEA en Cuba, son diagnosticados entre los 18 meses y 2 años de edad.  Las madres gestantes son monitoreadas,  la comunidad recibe información suficiente sobre situaciones que deben reportar para poner en alerta a los servicios de salud e iniciar un diagnóstico e intervención, lo que supone que los chicos mejoran notablemente sus habilidades por la atención temprana.

La mejor de las lecciones aprendidas es el sentido de comunidad que tienen los cubanos: salud, educación y familias trabajan juntos para apoyar a los niños con NEE  y eso hace que logren, en muchas oportunidades, mejores resultados.

En lo que estamos de acuerdo definitivamente,  es en recomendar a Cuba como un destino para la academia y el turismo; la calidez y la alegría de sus gentes, su lenguaje en positivo todo el tiempo, incluso con las dificultades que tienen, el mar caribe, la bellísima ciudad de La Habana y los maravillosos músicos que abundan por todo el territorio,  son muy  buenas razones para ir.

Les animamos a que se den esta oportunidad y descubran por ustedes mismos los tesoros que allí se esconden.

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