Por Édgar Alfonso
Los representantes estudiantiles de la UNAB acordaron oponerse a la norma institucional
que exige un puntaje mínimo en el Examen de Calidad de la Educación
Superior (Ecaes) para graduarse. La decisión fue tomada el viernes 4
de noviembre, durante una reunión extraordinaria de la Asamblea de Delegados
de la organización estudiantil, a la que asistieron 44 personas.
Los voceros presentarán varias propuestas al rector Gabriel Burgos Mantilla y al Consejo Académico para que se establezcan medidas alternativas que garanticen buenos resultados en las pruebas, las cuales son obligatorias para los estudiantes de último año de diez carreras de la Universidad.
La mayoría de asistentes a la reunión expresó que el Ecaes no es un exámen confiable para medir la calidad del estudiante. Algunos sostuvieron que esperar los resultados de la prueba implica retrasar los grados de quienes cumplen los requisitos para titularse en diciembre próximo, ya que los puntajes se conocerán en enero.
¿En lugar de imponer el Ecaes como un requisito que impide el grado tanto de los malos como de los buenos estudiantes, la Universidad debe brindar herramientas para obtener mejores resultados, más preparación para presentar los exámenes¿, expresó Augusto Uribe Santos, vocero ante el Consejo Académico.
La resolución 024 de mayo de este año, emitida por el Consejo Académico de la Universidad, establece que es obligatorio asistir a las actividades de preparación para los Ecaes (talleres, simulacros, etc) y obtener en la prueba ¿un puntaje igual o superior a la media nacional menos una desviación estándar del respectivo programa académico¿.