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Sergio Barbosa, un eterno estudiante y deportista en el maratón de la Psicología

Oct 27, 2023 | Facultad de Ciencias de la Salud, Graduados

Nuestro graduado destacado nos cuenta cómo fue su proceso de encontrar una profesión que reuniese las pasiones que tenía para poder dedicarse a algo que realmente lo llenara y lo encontró en la Psicología, carrera de la que se graduó en el año 2007. Desde entonces no ha parado de crecer académica y profesionalmente, ya que, como él menciona, es un apasionado por aprender cada día más.

¿Cuál fue el primer trabajo que hiciste al graduarte de la Universidad? ¿Puedes contarnos más de esa experiencia?

Para dar un mejor contexto, nací en la ciudad de Cúcuta y estudié en Bucaramanga la carrera de Psicología en la UNAB. Desde la universidad tuve interés por el área académica, la docencia y la investigación y cuando me gradué tuve la fortuna de conseguir un trabajo en el ámbito académico en una universidad de mi ciudad natal, donde comencé en bienestar universitario y también me dieron la oportunidad de formar estudiantes en temas del área de bienestar.

Parte de mi motivación por ser profesor es mi familia, ya que está conformada principalmente por profesionales en la salud y que han decidido ejercer enseñando en ambientes universitarios. Además, tuve influencia de mis profesores de la universidad, a quienes admiraba mucho la labor, el conocimiento que nos brindaban y el trabajo que hacían, lo que afianzó la decisión de ser psicólogo y docente universitario con enfoque principalmente a la investigación.

¿Qué destacas de la formación que te brindó el programa de Psicología de la UNAB?

Lo principal que puedo recalcar es la calidad, el nivel que tiene la universidad en profesores, la adaptación del campus El Bosque y su amplia gama de facilidades para la educación. Teníamos todo: la biblioteca, espacios de formación, laboratorios, cámara de Gesell, y creo que es un plus que el campus tenga solamente carreras relacionadas con la salud (en ese tiempo Psicología y Medicina) ya que propicia un espacio donde se respira academia y conocimiento, todo diseñado para aprender.

Algo que también me gustaría destacar y que tampoco se menciona mucho es el tema de bienestar. Agradezco los espacios culturales del CSU (Centro de Servicios Universitarios) que también tuvieron gran influencia en mí. Recuerdo con aprecio ir al cine tres veces a la semana y finalizar los viernes con fogata y poesía. En estos espacios conocí mucha gente de todas las carreras, lo que me influenció intelectualmente y me ayudó a transversalizar la forma de pensar y de ver el mundo.

Adicionalmente, aunque en ese tiempo existían los teléfonos celulares, no había redes sociales como las conocemos actualmente, por tanto, ocupaba mi tiempo visitando todas las bibliotecas de la universidad, en especial la del campus de El Jardín donde aprovechaba para leer y aprender constantemente. Fue un mundo de formación que utilicé y me nutrió mentalmente para poder estar donde estoy hoy en día.

¿Cuáles profesores fueron determinantes en tu proceso formativo? ¿Por qué? ¿Qué huella dejaron en ti?

Gonzalo Ordóñez es uno de ellos, quien me infundó pensamiento crítico, me animó a pensar por mí mismo que es una labor que tiene que hacer todo docente. Lo admiro por tener tal nivel intelectual y esa capacidad de llevar a sus estudiantes más allá del simple conocimiento. A su vez, otro docente que me gustaría destacar es Eddie Amaya, debido a que siempre apoyó mi pasión e intereses que estaban enfocados a la psicología del deporte. Él era la persona que me motivaba y apoyaba en la recolección de información en ese campo, porque en esa época eran muy escasos los textos. También, gracias a su apoyo, pudimos organizar el primer “Simposio Colombiano de Psicología Deportiva”, evento que me ayudó a hacer contactos de otros países quienes fueron mis compañeros y docentes posteriormente. Recuerdo que de ese simposio se hicieron algunas notas periodísticas en ese entonces:

Psicología en el deporte, un largo camino por recorrer: https://unab.edu.co/psicologia-en-el-deporte-un-largo-camino-por-recorrer/

Buen balance para el Simposio de Psicología Deportiva: https://unab.edu.co/buen-balance-para-el-simposio-de-psicologia-deportiva/

Finalmente, la lista es muy larga pero cada profesor del programa dejó su huella en mi a su manera.

¿Cómo te has fortalecido profesionalmente? ¿Qué estudios has desarrollado?

La primera maestría que hice fue en Informática Aplicada a la Educación, la cual estudié gracias a que pensaba que el futuro de la educación estaría mediado por las nuevas tecnologías, ocurriendo posteriormente el lamentable evento que todos conocemos, la pandemia ocasionada por el COVID–19, por lo cual estuve más preparado que muchos de mis colegas en la docencia.

Le siguió la maestría en Psicología del Deporte con una sociedad internacional de psicología del deporte, la cual es rama de la psicología por la que escogí mi carrera. Desde siempre me gustó el deporte y antes de estudiar yo era jugador de fútbol pero llegó el momento en el que tuve que decidir entre mis dos inclinaciones: escoger la vida de jugador de fútbol o una profesión de filósofo para continuar aprendiendo, pero ninguna de estas dos opciones me llenaba completamente, por tanto acudí a una psicóloga orientadora la cual me sugirió estudiar esta carrera que poseía una rama donde podría combinar mis dos pasiones y esto me abrió un campo y una idea totalmente nueva de lo que quería hacer.

Para entender un poco más acerca de este tema lo explicaré con un ejemplo: En los pasados juegos olímpicos pudimos observar diversos casos de deportistas que se negaron a participar para conservar su salud mental, ya que existen condiciones como la ansiedad precompetitiva que conlleva distintos síntomas a raíz de los nervios que causa entrar a una competencia, otro ejemplo es la falta de confianza o miedo, que se puede demostrar como una disminución de rendimiento en los partidos oficiales cuando el deportista rinde eficientemente en las sesiones de práctica. Como tal a esto se le llama psicología del rendimiento, ya que aquí no se les trata como pacientes, sino que se busca encontrar la manera de que rindan mejor y puedan superar todos estos obstáculos en el campo personal.

Actualmente estoy haciendo mi tercera maestría relacionada con el campo de la Neuropsicología Clínica, ya que es un tema importante que pienso va a marcar el futuro de la psicología en gran medida. Además, es un campo al que he estado cercano y constantemente he buscado profundizar más.

En fin, me encanta estudiar de todo y por eso soy profesor. Siempre he sentido que soy un eterno estudiante y por eso estoy constantemente inmerso en las universidades, en búsqueda de aprender más.

¿Cuál crees que es el sello que identifica a los graduados UNAB y los diferencia de los graduados de otras universidades?

Yo creo que lo más importante es la calidad en la formación. Agradezco mucho la manera en que la universidad me formó, tuve excelentes profesores quienes me educaron con calidad humana y recalco la cercanía que se me permitió tener con ellos. Es una universidad que te da todo para que puedas crecer          , ya depende de cada uno si lo aprovecha. Por mi parte, utilicé los espacios de aprendizaje, las bibliotecas donde leía por lo menos cien páginas diarias, y los demás espacios para crecer en general y cada uno lo aprovecha a su forma. Yo tuve la fortuna de sacarle el mayor jugo a la universidad.

Para aquellos estudiantes que están a punto de graduarse como profesionales en Psicología, ¿qué consejo les darías para asumir los retos que presenta la vida laboral?  

Mi consejo es seguir aprendiendo. La Psicología es una maratón. El reconocimiento en el ámbito se da con los años. Pretender que uno va a ser el mejor psicólogo recién graduado es un sueño. No digo que los recién graduados no tienen un buen nivel, pero uno en esa etapa tiene más dudas que respuestas y siento que a veces también afecta la cultura de la inmediatez porque todo es para ya, y lo que he podido identificar es que ser psicólogo es una carrera de largo alcance. Yo tengo todos los estudios mencionados, pero quiero seguir aprendiendo. En el futuro me gustaría hacer un doctorado o algo más, y lo hago siempre por gusto. Hay que tener en cuenta que en el camino profesional van a existir esos momentos de incertidumbre o miedo, pero es lo normal.

Opino también que el psicólogo actual debe tener un pensamiento más independiente porque uno cuando se gradúa piensa en qué empresa se puede emplear, pero la realidad es que conseguir un empleo como recién graduado no es fácil ni rápido. Los psicólogos también deben poseer una mente emprendedora ya que es una carrera liberal que permite trabajar donde quiera y cuando quiera. Cualquier campo de la Psicología va a llevar muchos años de preparación, pero se debe tener la humildad de continuar aprendiendo porque uno no se las sabe todas. Al final siento que eso es lo que me ha dado la diferencia porque yo, aunque siga aprendiendo más y más, continúo sintiéndome como un estudiante, con curiosidad de estar adquiriendo conocimiento porque el campo de la psicología es muy grande.

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